La Unión Europea aprobó uno de sus paquetes de sanciones más severos contra Rusia hasta la fecha, como respuesta directa a la guerra con Ucrania.
La decisión fue anunciada por la jefa de política exterior del bloque, Kaja Kallas, quien destacó la contundencia de las nuevas medidas.
“Estamos recortando aún más el presupuesto de guerra del Kremlin, persiguiendo 105 buques más de la flota en la sombra, a quienes los facilitan, y limitando el acceso de los bancos rusos a la financiación”, declaró Kallas este viernes en un comunicado en X.
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Las sanciones apuntan a ejercer una presión máxima sobre la economía de guerra de Rusia, bloqueando especialmente su industria militar y financiera.
“Estamos ejerciendo más presión sobre la industria militar rusa, los bancos chinos que facilitan la evasión de sanciones y bloqueando las exportaciones de tecnología utilizada en drones”, añadió Kallas.
Entre las medidas adoptadas se incluye un nuevo límite dinámico al precio del petróleo ruso, lo que busca afectar de forma directa sus ingresos energéticos.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, celebró el acuerdo alcanzado por los países miembros y subrayó la importancia estratégica del paquete aprobado.
La funcionaria europea afirmó que la UE está “atacando directamente la maquinaria bélica de Rusia” en una publicación en X.
Las sanciones presionarían a Rusia al “afectar a sus sectores bancario, energético y militar-industrial”, añadió von der Leyen, quien insistió en que “la presión… continuará hasta que Putin ponga fin a esta guerra”.
