<p>La hoja de ruta de BBVA sigue intacta después del <i>espaldarazo </i>que ha recibido de <a href="https://www.elmundo.es/economia/2025/07/17/6878ae0ce4d4d8057f8b4581.html">Bruselas al poner en duda la actuación del Gobierno en la OPA sobre Sabadell</a>, pero, sobre todo, ha reforzado su argumentario en caso de que finalmente decida acudir a los tribunales para recurrir las imposiciones del Ejecutivo socialista. En un proceso que se dilata ya cerca de 14 meses, la entidad ha dejado la puerta abierta a llegar hasta el Tribunal Supremo después de que el Consejo de Ministros decidiera endurecer las condiciones impuestas por Competencia en el que caso de que la OPA resultase existosa. Y hay otro argumento a su favor: la victoria parcial conseguida por Unicredit esta semana en un tribunal regional italiano en su propia lucha contra el Gobierno de Giorgia Meloni para hacerse con BPM. La historia es muy parecida: una OPA hostil, con limitaciones impuestas por el Ejecutivo transalpino y el toque de atención este miércoles de la Comisión Europa, que ve cómo su sueño de fusiones bancarias choca con las ansias de control de los gobiernos nacionales.</p>
