Un día después del atentado contra el senador y precandidato presidencial del Partido Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay, los avances en la investigación son escasos y preocupantes. Mientras el político continúa luchando por su vida, la pérdida de una posible prueba clave ha encendido las alarmas en el proceso judicial.
Aunque las autoridades confirmaron la aprehensión de un menor de 14 años, señalado como el presunto autor material del ataque, no existen hipótesis sólidas sobre los posibles autores intelectuales del intento de magnicidio. Pero lo más grave, según fuentes judiciales citadas por Semana, es que el celular del menor, pieza clave para rastrear comunicaciones y posibles vínculos, ha desaparecido.
Inicialmente, comenzaron a circular supuestas capturas de pantalla de chats que implicaban al adolescente en la planificación del ataque. Sin embargo, según el diario El Tiempo, esas imágenes correspondían en realidad a conversaciones entre delincuentes en Medellín vinculados a robos a conductores de plataformas, no al atentado contra Uribe.
En una grabación del momento de la aprehensión, difundida por medios nacionales, se observa a un hombre —presuntamente miembro de la Unidad Nacional de Protección (UNP)— extrayendo un objeto del bolsillo del menor, que podría ser su teléfono móvil. Sin embargo, en la rueda de prensa posterior al consejo de seguridad extraordinario, el director de la Policía Nacional, mayor general Carlos Triana, aseguró que no se halló ningún celular en la escena del crimen.
Te puede interesar: Investigan fallos en seguridad tras atentado contra Miguel Uribe: sicario de 14 años usó pistola Glock
“En el lugar de los hechos no había ningún celular. Sin embargo, todo lo que se está indicando forma parte de la investigación. Es un escenario complejo con mucha afluencia de personas, y hemos estado recolectando videos, testimonios y declaraciones”, explicó Triana.
La desaparición del teléfono ha vuelto a poner el foco en los integrantes del esquema de seguridad del congresista, más aún después de que el presidente Gustavo Petro, en una alocución del sábado, pidiera investigarlos por posibles fallas en la protección de Uribe Turbay.
Por ahora, la Fiscalía General de la Nación ha abierto dos líneas de investigación, una de ellas bajo el Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes, dado que el menor habría sido instrumentalizado para cometer el atentado. En su poder se halló una pistola Glock calibre 9 milímetros.
Cuatro líneas de investigación y pronóstico reservado
Según un comunicado oficial, el caso está siendo investigado por agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), la Dirección de Investigación Criminal (Dijín) y la Seccional de Investigación Criminal (Sijín), con el objetivo de esclarecer los móviles del ataque contra el político de oposición.
Miguel Uribe permanece internado en la Fundación Santa Fe, donde fue sometido a dos cirugías cerebrovasculares durante la noche del sábado, luego de ser estabilizado en la Clínica Medicentro.
El atentado ha generado una fuerte conmoción en Colombia. El domingo por la mañana, cientos de ciudadanos se manifestaron en rechazo a la violencia política, evocando los tiempos oscuros de las décadas de 1980 y 1990, marcadas por asesinatos de líderes políticos.
Infobae
Por: Itzel Olivo